Qué objetivos cumplir como entrenadores personales

Dani Meneses, Laura Pérez y Ángel de las Muelas, entrenadores personales de 9,8 Gravity Madrid, te cuentan qué objetivos cumplir para llegar a ser un buen profesional fitness y conseguir la plena satisfacción de tus alumnos en sus entrenamientos.

Contar con la formación adecuada y conocer las últimas tendencias son dos características indispensables, aunque no las únicas, para ser un buen entrenador personal. La empatía, la cercanía o el interés son otros valores que no se aprenden de manera académica y sí con la experiencia y la dedicación a esta profesión.

Dani Meneses, Laura Pérez y Ángel de las Muelas, el equipo fitness de 9,8 Gravity Madrid lo sabe y lo practica día a día en su centro de entrenamiento. Descubre junto a estos tres entrenadores personales qué objetivos cumplir para ser el mejor y conseguir la satisfacción de tus alumnos y entrenados con sus rutinas y ejercicios.

¿Cómo ser el mejor entrenador personal? ¡Sigue los consejos y recomendaciones de Dani, Laura y Ángel!

Dani Meneses, entrenador personal y recuperador funcional en 9,8 Gravity Madrid

«Como entrenador lo primero que pregunto a mis alumnos son los objetivos que los han llevado a querer entrenar, esto se denomina objetivo externo, donde la meta suele ser estar en forma, recuperarse de una lesión, perder peso o aprobar una oposición, entre otras. Tras varios entrenamientos suelo detectar otros objetivos que son motor de sus metas, los objetivos internos, más relacionados con aspectos sociales o la autoestima.

Durante la ejecución de alguno de los ejercicios propuestos, algunas veces, también encuentro desequilibrios musculares o una mala ejecución de los patrones de movimiento. Es entonces cuando el entrenador personal asume otro tipo de reto, lo que llamaríamos el objetivo funcional.

Muchas veces estos tres tipos de objetivos se entorpecen y hacen que el tiempo de consecución se ralentice, por lo que nuestro trabajo debe ser, detectarlos de forma eficaz, hablar con nuestro alumno, y explicarle los objetivos que vamos a abordar en sus entrenamientos y por qué.»

Laura Pérez, entrenadora personal en 9,8 Gravity Madrid

«Como entrenadora personal, hay tres aspectos claves que, a mi parecer, pueden determinar la continuidad del alumno. En primer lugar, me gustaría destacar una cualidad que, si trabajamos, nos puede diferenciar a la hora de abordar cada entrenamiento; el coaching, muy necesario para buscar la excelencia personal. Con él conseguiremos mejorar la salud emocional y física y extraer las fortalezas y el potencial de nuestros entrenados. Esto nos llevará a superar obstáculos y límites personales, convirtiéndolos en oportunidades.

En segundo lugar, debemos conseguir su adherencia al deporte transmitiendo alegría, pasión por la actividad física, y una actitud positiva frente a la vida. Solo siendo conscientes de sus beneficios y sintiéndolos, nuestros alumnos los aplicarán a sus rutinas y considerarán, al igual que nosotros, sus entrenadores personales, el deporte como un estilo de vida.

Por último, está la meta o el estado deseado del entrenado. En mi trabajo trato de implicarme en el objetivo de mis alumnos como si del mío propio se tratara. Pero no solo debemos centrarnos en el objetivo y cerrar los ojos. También hay días en los que la persona llega con un estado de ánimo más bajo, con alguna dolencia o cansado, etc. y nuestro deber es adaptarnos a sus necesidades pensando en su bienestar. Esta circunstancia nos obliga a tener una óptima capacidad de reacción y a poner en marcha los recursos oportunos para plantear una nueva sesión, diferente a la que habías preparado, con total eficacia.»

Ángel de las Muelas, entrenador personal en 9,8 Gravity Madrid

«¡No! No solo eres personal trainer; debes de haberte dado cuenta ya, ¿no es así ? Eres entrenador personal, coach, psicólogo, animador, dj, gestionas tiempos, organizas ejercicios, planificas, administras… en definitiva eres un líder.

Es por lo que con mis palabras te animo a no quedarte únicamente con lo que has aprendido en libros o en tus clases. Observa y no te pierdas nada desde que el alumno entra por la puerta. Párate a ver su rostro, su postura al caminar, la vitalidad de sus pasos hacia el vestuario, porque el mismo te dará las pistas de cómo debes enfocar tu sesión.

Debes tener la clase planificada, pero que quizá tengas que darle otro enfoque o cambiar en cuestión de segundos el plan de entrenamiento porque el alumno ha sufrido un contratiempo.

Mira siempre a tu alumno, analiza sus movimientos, su expresión facial, pregúntale cómo se siente en varias ocasiones sin miedo a resultar repetitivo y recibe información de todo lo que te rodea. Del material que tienes a tu disposición, de la comodidad de la sala, de si el alumno necesita música, de si hace frio o calor; atento a que se hidrate, a su congestión muscular y a su nivel de fatiga.

Confía en tus conocimientos y en la sesión que has planificado y mantente preparado por si tu alumno no puede realizar algún ejercicio que le has mandado para modificarlo.

Habla con entusiasmo, que tus mensajes sean positivos cargados y se encuentren cargados de fuerza y energía; debes intentar que tus palabras no motiven el desánimo en tu alumno. ¡Rétale! Y piensa que tu meta es llevar a la persona que tienes delante por el camino de la superación personal.»

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